Cuando el ocaso de la tarde caiga,
Y la penumbra de la noche llegue,
Te miraré en silencio
Te besaré callado
Te envolverán mis brazos
Como un preludio de la flor que se marchita,
Porque mi alma siente que asi callado,
Te dirá mi amor como te extraño,
Y que me pesa con dolor el ser ausente,
Cuando el silencio de la noche llegue.
Cuando el ocaso de la tarde llegue,
Y mi guitarra esboce su canción desesperada,
Deslizaré mi canto,
Reviviré otros tiempos,
Y cantaras conmigo,
Esas canciones que unieron nuestras almas,
Porque la clave de este sol aun te ama,
Porque entonces habra una y mil razones para amarte,
Y que me pesa con dolor el ser ausente,
Cuando el silencio de la noche llegue.
Cuando el silencio de la noche llegue,
No habrá mas conjeturas
Solo habrá certezas,
La certeza de que tu siempre estuviste,
En las buenas y en las malas conmigo,
La certeza que mi alma esta tranquila,
Porque te ame y que he cumplido,
El sagrado juramento que hicimos,
Tu y yo amor de mi alma.
En esa noche vendrá el silencio,
Y tu amor sera mas cierto,
Porque los años me dirán que me amaste,
Con ese amor sincero
Con tu tiempo, y con tu vida,
Sabiendo que entonces
Va llegando el eclipse,
Mientras las fuerzas se extinguen,
Y la noche inexorablemente llega,
Con su penumbra, con sus verdades,
Porque el silencio de la noche es el presentimiento,
De que mi vida ya se extingue lentamente.
Autor: Paco Cóndor Inche