En algún rincón de mi alma
se esconde el suspiro que me dejo tu amor,
Porque cuando menos pienso,
me brota este suspiro de pena y amor por ti.
En algún rincón de mi alma
se esconde el poema que nuestro amor creo
Poema que escribiste,
con dedos de plata, y llantos de cristal.
En algún rincón de mi alma
me falta tu presencia que tu ausencia se llevó,
Ausencia que se siente,
como cuando el fuego se extingue porque el aire ya no está.
En algún rincón de mi alma
me duele el adiós punzante que tus labios al marcharte habló,
Labios que besar supieron,
para luego un día taladrar mi alma con un simple adiós.
En algún rincón de mi alma
se esconde el fracaso que tu ausencia me dejó,
Quizá tú seas el Viento,
que el autor la titulara; Lo que el Viento se llevó.
Pareciera aún mentira,
después de haberte querido como te quise yo,
Me encuentre hoy tan solo
Sin ver tu rostro, tus cabellos, ni tus besos que me hicieran tan feliz.
Pareciera aún mentira
que hace poco éramos dichosos, ¡tan dichosos!,
¡Y aún tan felices!,
que quizá algún día tu y yo cariño mío ¿habríamos de ser?.
¿De que sirve hoy la vida,
si a un poco de alegría le prosigue un gran dolor?,
de que que sirve la alegría.
Si después de ser tan felices hoy yo tenga que llorar.
En algún rincón de mi alma
donde tengo la pena escondida que tu ausencia me dejó,
En ese mismo rincón de mi alma,
se me pudre aquél poema que nuestro amor lo creó.
Hecho a partir de otro espero os guste
Paco Cóndor I.
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